PACO MANZANEDO

Este moreno que te atrae con solo mirarlo, que con los años la guapura le va sumando es Francisco Manzanedo, conocido como Paco Manzanedo un actor español que nació en Madrid, 18 de mayo de 1978.

No tenía ni idea de qué quería con su vida, en cuanto a su profesión y fue probando. Probó económicas, probó Criminología… y no le llenaba nada de lo que hacía. Por casualidad llegó a una escuela de interpretación y esas navidades hizo una muestra en público y cuando  subió al escenario se dio cuenta de que eso era lo que quería. Desde entonces ya no se ha vuelto a bajar. Ha habido momentos mejores, momentos peores, pero siempre ha estado ahí.

                                                                                                  Estudio en Corazza,una escuela de interpretación fundada en 1990 por Juan Carlos Corazza en Madrid,  con un montón de profesores. Porque Manzanedo los primeros años  estuvo muy perdido, no tenía muy claro el tema de la técnica. Con quien realmente se formó es con Fernando Piernas. "Es el que ha puesto orden a todo mi caos y con el que realmente me he descubierto como actor y como el actor que quiero ser". Ha sido cuando  empezó a hacer los trabajos y la forma de trabajar que  había soñado siempre.

Su primer trabajo profesional fue de figurante en el Teatro Español con 21 años en Las Mocedades del Cid y, después, en La Venganza de Don Mendo. Luego ya de ahí se fue a hacer una serie, “El Secreto”, con Valerio Bosserman, hablando de  series decir que su primera aparición en una serie fue "Médico de Família"en 1997. Año en que debutó.

Su día a día como actor es como un pico y pala constante. "Me levanto por la mañana y me formo en todos los aspectos en los que un actor se pueda formar: físico, mental, emocional, espiritual. Tengo mi momento de todo en el día".

 Aunque parezca un actor muy de tele y de cine, le es más interesante el teatro. Aunque lo descubrió un poco tarde, empezó a hacer microteatro y descubrirse como actor de teatro, lo que le gustaba y le gusta.

 El teatro le da pura vida. Es algo muy diferente a lo que da la tele o el cine. "Nunca me he sentido tan vivo como haciendo teatro, siendo tan yo y a la vez tan otro". "El teatro, la escalada, la moto y otras cosas me exigen tal nivel de concentración que me olvido de todas las miserias de este mundo y soy absolutamente feliz en el aquí y en el ahora. No existe nada más que lo que estoy haciendo. Y para mí eso es la felicidad. Me pasa también haciendo el amor".

 "Dentro de los condicionantes uno ya tiene la obligación de romper barreras. Es decir, yo estoy deseando hacer un personaje de mujer o un travesti o cosas muy extremas o muy alejadas de mí donde el trabajo sea muy, muy, muy evidente, ¿no? Donde haya un proceso de formación y de creación loco, que son los que a mí me gusta vivir, y meterme en la locura y estar 24 horas pensando en cómo la lío parda."

 ¿Has pensado en dejarlo alguna vez? " He pensado en dejarlo todos los días."