Este blanquito adornado por este vello sutilmente aterciopelado, no importaria estar horas y horas acariciandolo pasando los dedos por él. Un vello que hace que realce el blanco de sus pezones que hace que te se valla los ojos hacía ellos.
Su barba si no más lo enbellece, si le añadimos sus ojos su mirada es atractivo, seductor, tentador pero si a todo ello le añadimos cuando sus labios empiezan a dibujar esa picara sonrisa, totalmente un angel arrebatador. Lastima que no se encuentren muchas imagenes de él, de Amadeo... como estara al día de hoy
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